La vida en Estados Unidos me ha sorprendido en muchos aspectos. Pero lo que más me ha llamado la atención es la amabilidad de la gente. Cuando vas por la calle, todo el mundo se saluda y se paran a hablar, aunque no se conozcan mucho. Eso es algo que no había visto antes.
Lo que más me gusta de la vida aquí son los partidos de fútbol americano los viernes, porque hago cheerleading y me lo paso genial. Es una experiencia súper emocionante y divertida.
Aunque estoy disfrutando mucho, lo que más echo de menos es a mi familia y amigos. A veces, me encantaría que estuvieran aquí conmigo o poder darles un abrazo, especialmente en ciertos momentos.
En cuanto al colegio, me encanta que las clases no sean tan teóricas, sino más prácticas. Eso me facilita mucho el aprendizaje. Aquí puedes aprender cosas como cocinar, primeros auxilios, y tienes muchas más clases de arte. ¡Es súper variado!
El deporte es algo fundamental aquí, y creo que me ha ayudado muchísimo a integrarme y hacer amigos. Además, me mantiene activa y siempre haciendo cosas. He conocido a bastante gente, y en general los estadounidenses son simpáticos y abiertos.
Algo que no me gusta tanto es la comida. No está mal, pero definitivamente no es lo que más disfruto de mi experiencia aquí.
Mis cinco mejores experiencias hasta ahora han sido:
- Mi primer partido como animadora.
- La primera vez que quedé con mis amigas de aquí y fuimos juntas a la playa.
- El viaje con mi familia anfitriona a Wisconsin, donde fuimos al zoo y probé las Crumbl Cookies.
- La primera vez que entré en Walmart (¡es enorme!).
- El día que fui con mis amigas a ver el atardecer en un lago, fue precioso.
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